miércoles, 27 de enero de 2016

Insomnio. U Otra Forma De Auto-Boicotearme Involuntariamente.

Diría que no quiero mirar el reloj mientras escribo esto, pero es precisamente lo primero que hice antes de tan siquiera oprimir la primera tecla. (Veo que sale el Sol y ni me dormí ni terminé de escribir esta basura de entrada).

Desde la repentina aparición este sábado de la alcohólica pareja de mi progenitora, pasadas las 5 de la mañana gritando; "¡Churros, Churros!" y dando por saco al perro (ocasionando gruñidos y ladridos esporádicos como era de presuponer)... He empalmado la rutina diaria de dormir apenas unas horas por la noche y cayendo rendido por las tardes.

Quiero destacar que viviendo en un bloque de pisos, se puede atisbar sin mucho esfuerzo de imaginación, el tipo de "afables" miradas me echan los vecinos desde aquella noche al cruzármelos en las zonas comunes del edificio.

No diría que tenga el sueño cambiado. Directamente tengo el sueño trastornado.
Mi cansancio físico y mental, sueño y ganas de dormir parecen haberme declarado la independencia y cada cual va por libre.
Con lo reacio que soy a las pirulas, me veo mendigando en el super sobres de valeriana cual yonki ojeroso.


Dejando de lado estas movidas que no le importan a nadie...
Mi intención era comenzar este mismo lunes a instaurar una serie de cambios que estoy seguro mejorarán y me ayudarán a ganar en salud, y ya puestos, ir anotando por aquí resultados, progresos y tal.
Entre ellos salir por la mañana a hacer un poco de ejercicio. Pero viendo el percal que tengo; no sé si me compensa más comenzar a practicar lanzamiento de martillo con mi propia cabeza contra la pared, para ver si al menos perdiendo el sentido recupero toda la falta de sueño.

Ya veremos qué va pasando...

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